¡PASAME EL MATE, TITO!

ESCRIBÍ LO QUE QUIERAS. OPINÁ LO QUE GUSTES. LIMPIATE LAS PATAS EN EL FELPUDO Y, PORRRRRRRRRR FAVORRRRRRR, ¡NO NOS LAVES EL MATE!

martes, mayo 29, 2007

USEN PROTECTOR SOLAR...

...para los que creen que la vida la hacen ellos mismos, que el tiempo no pasa, que ser mala gente les será perdonado, que son los "directores" de su propio destino, cagándose en todo... y para los que sí creemos que hay que seguir adelante, pero edificando nuestra felicidad en nosotros mismos, no en el dolor de otros, va este video que dice mucho de mucho, de esas cosas que creemos que no son necesarias, simplemente porque pecamos de soberbios.

Y... remember: usen protector solar. Porque, gracias a Dios, todos somos mortales.

Sin carteles de esperanzas vanas que sólo se dicen en un blog o en algo tan superficial como la web (porque lo importante es hablar de frente y mirando a los ojos, tanto para lo bueno como para lo malo). Nos pareció un mensaje que va más allá de eso. Desde este patio, que hoy huele a jazmines frescos y con el corazón lleno de alegría. Ojalá a todos los que pasen por acá, les suceda lo mismo.

(para los que saben inglés, notarán que en algunos subtítulos la traducción no es exacta, pero la idea global está intacta).

domingo, mayo 27, 2007

TITOLÍSIMO SATELITAL

"COCINATE ALGO CON EL TITO, O SEA YO"
Bueno, che, pa' contribuir al desasne de la'sama de casa y por qué no, de lo'samo de casa (no hay que olvidar que hay mucho tipo que no labura y hace lo'quehacere'doméstico), acá yo, el Tito, les voy a pasar una receta de esas de mi'sabuelas: "merenjenas" al escabeche.
Primero que tutti, te comprás unos tré'kilos de "merenjenas" de las que son rayaditas violetitas y blancas (si queré', hacelas con las negras o las blancas, pero pa'mí, las rayaditas son las má'sabrosas, vea).
Una vez que llegás a tu casa, las sacás de la bolsa, las lavás (no seas roñoso'!) y las cortás en fetas finas (de uno' cuatro milímetro, maso).
Me se consíguen una asadera de esas que tienen borde'saltos. Ahí, sobre uno de lo' bordes, me apoyan una tabla de esas de picar (las de madera, de las grandes, eh?), cosa que les quede como un tobogancito. Y empiezan a colocar las feta' de "merenjenas" de la siguiente manera: una capa me la' sacuestan horizontale', le echan sal gruesa (no mucha, eh?. Espolvoreen, nomá) y otra capa, verticale', y de nuevo sal gruesa. Y así "sorcesivamente", hasta que terminé' con los tré' kilo de esta "sortoliza". Se te va a formar una torrecita importante. Andá apretando con las manos cada capa de feta' de "merenjenas" pa'que queden parejitas y vayan soltando el agüita que deben soltar.
Una vez que tenés esto todo apiladito, le poné'sencima otra tabla de madera (o sea, te queda un "sanchigüe" de madera-"merenjena"-madera). Sobre esta última tabla, ponele un peso importante para que haga de prensa (una piedra pesada, iría bien: yo tengo una que uso pa'eso, ademá' de revoleársela a alguna de las dos en una cuando me hacen encular).
Así como te quedó la asadera con la piedra-prensa, te lo llevás a un lugar donde le dé el sol todo el día. Tienen que chuparse el sol de todo un día (de noche entralas, ¡no sea cosa que algún chorro huela morfi y te la'safane!).
Al día siguiente, quitá toda el agüita negra que largaron, sacá la piedra y la tabla superior (vas a ver que quedaron sequitas y arrugaditas) y ponés a hervir unos dó'litros de vinagre en una cacerola y vas hirviendo las "merenjenas" sólo por do' minutos cada tanda que vayas sumergiendo. Las que ya estén hervida', las vas pasando a un colador pa que vayan' scurriendo el juguito.
Cuando hayas terminado de hervir y 'scurrir las "merenjenas", te conseguís unos frasco' de vidrio para ir colocándolas. Primero, ponés do' o tré'sojitas de laurel en el fondo del frasco. Ponés las "merenjenas". Les vas a ir agregando aceite, ajo (no más de un diente, eh?, que despué' no podé'sabrir la boca por do'mese'!), orégano y unas semillitas de hinojo. Poné otra vez 'sojitas de laurel cuando completes el frasco y siempre tené en cuenta que el aceite tape por completo a las "merenjenas". Tapá bien y llevalas a la heladera. Por una semana, no las comas, para que se concentre el sabor. Luego, morfate las que quieras como quieras: solas, con pancito, acompañando el asado o lo que se te cante. Son un ricorrrrr.
Y bueno, che, fue un servicio más a la comunidá de este servidor: el Tito.